Si has elegido ventanas de PVC para tu proyecto, es porque seguro tomaste en cuenta que es un material cuya vida útil promedio es de al menos 50 años. Asimismo, consideraste las cualidades de sus prestaciones más importantes, como su excelente relación precio-valor, alta reciclabilidad, aislamiento térmico y acústico de tecnología avanzada, gran hermeticidad al agua y al aire, resistencia comprobada de indeformabilidad y un mantenimiento sin mayores complicaciones.
¿Qué cuidados requieren las ventanas de PVC?
Dada su composición innovadora, este material no se raya, no se decolora y soporta perfectamente las condiciones climáticas más adversas. Debido a esto, no precisan de cuidados especiales para mantenerlas limpias; solamente agua y jabón neutro para que conserven ese brillo característico de su acabado y esa textura suave de su diseño.
Limpiador Koraclean
Al ser especialistas y distribuidores oficiales de la marca Kömmerling, siempre estamos al tanto de sus recomendaciones y productos diseñados especialmente para el cuidado de sus modelos.
Por lo que queremos recomendarte para una limpieza mucho más efectiva utilizar un producto específico, diseñado especialmente para la limpieza de ventanas de PVC, Koraclean, una sustancia jabonosa que no contiene ingredientes abrasivos, que conserva el brillo de las ventanas y las protege de la suciedad.
Prolonga su vida útil
Además de su limpieza periódica, el mantenimiento es una parte esencial para que podamos conservar su funcionamiento en niveles óptimos y a su vez alargar lo más posible su durabilidad. Para ello, es importante tomar nota de los siguientes tips, que sabemos te van ayudar a conservarlas impecables:
- Manipulación. Una recomendación general es evitar cerrar violentamente las ventanas y puertas. Lo idea es siempre manejarlas con cuidado y prudencia, de tal forma que su funcionamiento no se vea alterado por el abuso.
- Film protector. En caso de que la perfilería aún conserve este elemento de protección, lo aconsejable es quitarlo antes de los 3 meses. Su uso está pensado para proteger durante su traslado y el proceso de instalación, de modo que no sufran golpes o algún arañazo. Sin embargo, dejarlo por tiempo prolongado provocará que se cristalice, impidiendo su eliminación posterior y afectando la estética de la ventana de PVC.
- Cargas. Los perfiles fabricados con este material han sido creados para aguantar las fuerzas relacionadas con su uso e implementación. No se aconseja otro tipo de cargas como sujeción de andamios, elevación de peso, aires acondicionados u otro sistema paralelo al cristal.
- Trabajos. Cuando hagas mantenimiento a la fachada o al interior de tu hogar, procura proteger las ventanas mediante algún elemento que lo resguarde de las salpicaduras, las manchas o algo que pueda alterar su estética original.
- Lubricación. Las piezas de las ventanas de PVC, como los herrajes, están constantemente sometidas al desgaste y las condiciones climáticas. Para que funcionen correctamente, se recomienda aplicar aceite lubricante por lo menos una vez al año. En cuanto a las juntas de estanqueidad, hay que usar un paño impregnado de lubricante con silicón para limpiarlas y mantenerlas elásticas.
- Limpieza. Puedes lavar cada mes el marco y la hoja con un trapo, una solución jabonosa que no tenga ingredientes abrasivos o solventes y agua. Con perfiles Kömmerling puedes usar Koraclean. Para los cristales utiliza jabón líquido y agua templada.
Las ventanas de PVC tienen una vida útil promedio de 50 años, pero no está demás darles ciertos cuidados para asegurar que puedan durar todos esos años en perfectas condiciones, manteniendo sus características intactas.