Si estás pensando en instalar ventanas nuevas en tu casa, las ventanas correderas de PVC son una opción muy acertada. En los países nórdicos, como por ejemplo Alemania o Reino Unido, es donde más se utiliza este material. Estas son algunas de las razones de por que comprar ventanas correderas de PVC para tu hogar:
Ventajas de las ventanas correderas de PVC
No solo existen las ventanas de PVC, sino que también hay las ventanas de aluminio, que son también una buena alternativa para tu hogar. Pero no cabe duda de que las ventanas de PVC son más adecuadas para lugares con un clima más hostil.
Una de las principales ventajas de este tipo de ventanas es que tiene muy buena capacidad de aislamiento, esto significa que mantienen el control de la temperatura. Cuando haya un clima caluroso, el hogar se mantendrá fresco, mientras que cuando haya un clima frío, el hogar se mantendrá caliente.
Que las ventanas mantengan la temperatura puede suponer un ahorro de hasta el 50% en la factura de la luz. Y eso no es todo, no solo son capaces de mantener la temperatura adecuada, sino que también ofrecen un aislamiento acústico, que te aísla del ruido del exterior.
El aluminio no es un material muy adecuado para el país en que vivimos, debido a que hay zonas con temperaturas muy extremas, y cambiantes según la época del año. Si lo que estás buscando es ahorrar en la factura de la luz y mantener tu hogar aislado, la mejor opción que puedes tomar es instalar ventanas correderas de PVC.
Tanto el PVC como el aluminio tienen precios parecidos, pero con el ahorro de luz, te acaba saliendo más a cuenta las ventanas correderas de PVC, aunque las de aluminio tengan rotura de puente térmico.
Un aspecto positivo es que este tipo de ventanas es respetuoso con el medio ambiente. Y es que hay que tener muy en cuenta este aspecto debido a la situación que está viviendo el planeta.
Una desventaja de las ventanas de PVC es que, en comparación con el aluminio, dura menos tiempo y no es tan bonito estéticamente. Aun así, sigue teniendo una buena durabilidad, pudiendo llegar a durar hasta 50 años fácilmente.
Otra desventaja es que las ventanas correderas de PVC tienen un precio más elevado que algunas ventas con perfilería de madera o aluminio, pero no hay que verlo como un gasto de más, sino como una inversión a largo plazo.
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